13 de febrero de 2025

Penalización del “negacionismo”: una ley fascistizante

Alguien me preguntó qué opino sobe este proyecto de ley. Hace más de 30 años que soy docente de Introducción al Pensamiento Científico en el Ciclo Básico Común y de Metodología de la Investigación en diferentes facultades. Si tuviera que reducir todas las materias a una sola enseñanza, esta sería las siguientes: en las ciencias fácticas hay asimetría en la contrastación de las hipótesis y teorías. Es decir, no existe ninguna hipótesis científica de la que podamos decir que es definitivamente verdadera, aunque en principio se las pueda “falsar”. La investigación científica no establece verdades-dogmas a las que se prohíba cuestionar. Todo es cuestionable, y todo debe ser cuestionado, si queremos garantizar el avance del conocimiento.

Por tanto, ¿qué voy a opinar de ese proyecto de ley? ¡Es una barbaridad! Propone regresarnos a los tiempos de Galileo, en los que una instancia extracientífica ejercía un Poder de Policía sobre e Saber. Me parece increíble que gente que se considera a sí misma “progresista” proponga semejantes medidas, claramente fascistizantes. ¡Y que lo haga dentro de la Universidad!

También enseño Lógica. ¿Cómo podría, entonces, usar tan livianamente el neologismo “negacionismo”? Ese término carece de sentido. Todos somos “negacionistas” respecto de algo. Y, por el hecho de serlo, somos simultáneamente “afirmacionistas”. Ejemplo: “negar” que la conquista de América haya sido un genocidio implica “afirmar” que no lo fue. Y afirmar que lo fue implica negar que no lo fue. El uso del término “negacionismo” tiene como propósito cerrar los debates estigmatizando y amenazando a quien habla, y no promoverlo, que es lo saludable.

Además, es una simiesca imitación de lo que hacen algunos países imperialistas contra sus propios disidentes intelectuales.

Por último, soy socialista desde mis 16 años. Tengo en claro que cualquier recorte de las libertades democráticas, aunque aparente tener un contenido “progresista”, termina, en la sociedad capitalista, afectando a los explotados y oprimidos. Por tanto: ¡NO a la penalización del “negacionismo”! ¡SÍ a la libertad de expresión, de opinión, de crítica y de investigación!

A la mentira se la derrota con la verdad, metiendo preso a quienes la enuncian.

Lic. Gustavo Cangiano

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