13 de febrero de 2025

El Obispado de Merlo-Moreno ratificó su ayuda a los pobres sin ninguna condición

Luego de las escandalosas expresiones partidarias del cura Paco Olveira, a las que nos hemos referido en la edición de ayer, el Obispado de Merlo-Moreno emitió un comunicado aclaratorio suscrito por los padres obispos Juan José Chaparro (titular) y Oscar Miñarro (auxiliar).

«Jesús no pone ninguna condición, solo el hambre del hermano más pequeño», afirman los prelados.

Y añaden: «Ante la inquietud de algunas personas que nos han acercado su consulta, referida a la atención de nuestras comunidades, comedores y/o merenderos, a los más necesitados, comunicamos que dicho servicio de la Diócesis de Merlo-Moreno se realiza normalmente con el esfuerzo de muchos voluntarios/as, y se seguirá recibiendo a todas aquellas personas y familias que, ante su necesidad, se acercan a los mismos. Por supuesto, dentro de nuestras posibilidades y medios».

Finalmente, destacan que “nuestra Diócesis tiene una larga y rica tradición de servicio a los empobrecidos sin acepción de personas por sus creencias, origen, opción partidaria, etc. Del mismo modo que luchamos por la paz, la justicia, el buen vivir de todo nuestro pueblo, por el cual oramos y trabajamos en nuestras comunidades, siguiendo las inspiraciones del Evangelio de Jesús y las enseñanzas de la Iglesia. Más que nunca sentimos el compromiso de estar, acompañar y hacer nuestras las necesidades de todos nuestros hermanos”.

De este modo, la Iglesia local toma distancia de un sacerdote imprudente, que, con sus declaraciones altisonantes, adquiere notoriedad a costa del descrédito de la institución eclesiástica. Cabe destacar y reconocer que la tarea solidaria del Obispado queda indemne ante la conducta polémica de alguno de sus miembros.

Si bien «un frasco de tinta no mancha el océano», celebramos el comunicado aclaratorio de los padres obispos Chaparro y Miñarro. Porque Olveira no es una oveja descarriada ni un ingenuo. Es un personaje mediático que se aprovecha del sacramento del orden para hacer política partidaria y clientelismo. Dios quiera que este haya sido el límite y no tengamos que volver a escribir sobre temas que, como católicos, nos entristecen y duelen.

Horacio E. Poggi

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