Jamoncito y Mortadela

Victoria Capitana describió a Milei como un “pobre jamoncito”. El pan del sándwich serían ella y la hermana presidencial Karina. Curiosa imagen de panadería para referirse a una relación institucional en tensión permanente por las públicas diferencias que, en diversos temas, mantienen el jefe del Estado y la concertista de la campanilla del Senado. Pero la imagen de panadería también le caería de perlas a Victoria Capitana. Y una lengua viperina podría considerarla una feta de mortadela en el sándwich de los Milei. Humoradas al margen, la solterona de caderas tropicales, en la entrevista concedida al canal de cable TN del Grupo Clarinete, formuló declaraciones interesantes. Y, dicho sea de paso, repudiables. Una de ellas hizo hincapié en los militares, la debilidad más pronunciada de la Vicepresidenta. Con la gorra puesta, rechazó la intervención castrense en la lucha contra el narcoterrorismo. Dijo que disentía porque los militares que, en los años 70, lucharon contra el terrorismo terminaron presos. Nada que ver. La respuesta inteligente y acertada corrió por cuenta del senador nacional Wado de Pedro, quien le recordó a Villarruel que los represores “están presos por cometer delitos de lesa humanidad, torturar y desaparecer personas, por los vuelos de la muerte y el robo de bebés”. Y concluyó: “Parece mentira, pero es necesario volver a aclarar algunas cosas”. Impecable. Jaque mate.